Lesión de ligamento cruzado anterior en pacientes pediátricos: Enfoque especializado para pacientes en crecimiento
La lesión del ligamento cruzado anterior (LCA) es un problema creciente en la población pediátrica y adolescente debido al aumento de la participación de niños en deportes competitivos desde edades tempranas. Esta lesión presenta desafíos específicos en los pacientes en crecimiento, especialmente por la presencia de las fisis abiertas (placas de crecimiento), lo que requiere un enfoque quirúrgico especializado.
Importancia de las técnicas quirúrgicas adaptadas a la población pediátrica
Una de las principales controversias en el manejo del LCA en niños y adolescentes es cómo abordar quirúrgicamente la lesión sin comprometer el crecimiento óseo. Las técnicas utilizadas en adultos no son directamente aplicables, ya que pueden lesionar las fisis, lo que puede generar deformidades angulares o discrepancias en la longitud de las extremidades.
Tradicionalmente, algunos cirujanos adoptaron un enfoque conservador, retrasando la intervención quirúrgica hasta que el paciente alcanzara la madurez esquelética. Sin embargo, investigaciones recientes han demostrado que esperar a que el niño alcance la madurez esquelética puede ser un error clínico, ya que el tiempo prolongado de inestabilidad articular aumenta el riesgo de:
- Lesiones meniscales adicionales.
- Deterioro del cartílago articular.
- Desarrollo temprano de artrosis.
Por lo tanto, es fundamental intervenir de manera temprana utilizando técnicas quirúrgicas diseñadas específicamente para proteger las placas de crecimiento.
Opciones quirúrgicas específicas para pacientes en crecimiento
El tratamiento quirúrgico en pacientes pediátricos con lesiones de LCA debe ser individualizado, teniendo en cuenta la edad, el grado de madurez esquelética y el nivel de actividad deportiva. Las técnicas quirúrgicas diseñadas para esta población incluyen:
- Reconstrucción trans-fisaria:
- Utiliza túneles pequeños a través de las placas de crecimiento, minimizando el riesgo de daño.
- Es una opción adecuada para adolescentes con un crecimiento residual limitado.
- Reconstrucción anatómica con preservación fisaria:
- Evita completamente cruzar las fisis.
- En esta técnica, se utilizan injertos que se fijan fuera de las placas de crecimiento, lo que es ideal para niños más pequeños con un gran potencial de crecimiento restante.
- Técnicas híbridas:
- Combinan componentes de ambas estrategias según las características específicas del paciente.
Evidencia científica y resultados
Estudios recientes han demostrado que las técnicas quirúrgicas adaptadas a la población pediátrica ofrecen excelentes resultados funcionales y reducen significativamente el riesgo de lesiones secundarias. Además, el retorno a las actividades deportivas es comparable al de los pacientes tratados con técnicas tradicionales en etapas más tardías.
Un metanálisis publicado en la American Journal of Sports Medicine demostró que la reconstrucción temprana del LCA en pacientes pediátricos tiene tasas de éxito superiores al 90% en la restauración de la estabilidad articular, sin afectar significativamente el crecimiento óseo cuando se utilizan técnicas apropiadas.
Conclusiones
El manejo de las lesiones del LCA en pacientes pediátricos requiere una comprensión detallada de las implicaciones del crecimiento óseo y de los riesgos asociados con la inestabilidad articular prolongada.
- Postergar la cirugía hasta la madurez esquelética no es una estrategia adecuada.
- Las técnicas quirúrgicas adaptadas, como la reconstrucción con preservación fisaria o trans-fisaria, ofrecen soluciones seguras y efectivas para esta población.
Es fundamental que los equipos quirúrgicos se mantengan actualizados en este campo, priorizando el bienestar del paciente y evitando secuelas a largo plazo que puedan impactar su calidad de vida y su desempeño físico.

resonancia magnética que muestra el ligamento cruzado de la rodilla.

ilustración que muestra la rotura del ligamento cruzado anterior.