La enfermedad de Legg-Calvé-Perthes (o simplemente enfermedad de Perthes) es una afección ortopédica que afecta la cadera en niños, generalmente entre los 4 y 10 años. Ocurre cuando el flujo sanguíneo hacia la cabeza del fémur (la bola de la articulación de la cadera) se interrumpe, lo que lleva a la muerte del tejido óseo (necrosis avascular) y eventualmente a deformidades. A continuación, se detalla información clave sobre esta enfermedad:

Causas y factores de riesgo:

La causa exacta de la enfermedad de Perthes no está clara, pero se asocia con:

• Interrupción temporal del flujo sanguíneo a la cabeza femoral.
• Factores genéticos y predisposición familiar.
• Mayor incidencia en niños varones.
• Relación con ciertos factores ambientales o exposición al humo de tabaco.

Síntomas principales:

• Dolor en la cadera, la ingle o la rodilla.
• Cojera persistente o dificultad para caminar.
• Rigidez en la articulación de la cadera.
• Reducción del rango de movimiento.

Diagnóstico:

• Radiografías: Para identificar el daño óseo y evaluar la deformidad.
• Resonancia magnética (RM): Detecta cambios tempranos en el flujo sanguíneo y daño en los tejidos blandos.
• Gammagrafía ósea: Evalúa el suministro de sangre en la cadera.

Tratamiento:

El objetivo del tratamiento es mantener la forma de la cabeza femoral y mejorar el rango de movimiento mientras el hueso se regenera, lo que puede llevar años.

Opciones de tratamiento conservador:

1. Reposo y restricción de actividad física: Para evitar el agravamiento de la lesión.
2. Fisioterapia: Mejora la movilidad y fortalece los músculos de la cadera.
3. Ortesis o férulas: Ya prácticamente en desuso por los resultados que se consiguen, pero el objetivo es  mantener la articulación en una posición adecuada.
4. Medicamentos: Analgésicos o antiinflamatorios para aliviar el dolor.

Opciones quirúrgicas:

• Osteotomía femoral proximal : Reposicionamiento de la cabeza femoral, que en etapas tempranas el objetivo es conseguir meter la cabeza dentro del acetabulo para que nos sirva de molde y que cuando ocurra la reosificacion la cabeza esté esférica  y en etapas tardías es la colocación en la mejor posición posible para una mejor movilidad articular.
• Artrodiastasis: Uso de un fijador externo para aliviar la presión en la articulación y permitir la curación.
• Reconstrucción de la cadera: En casos graves, especialmente si la enfermedad no se trata adecuadamente en la infancia.

Pronóstico:

El pronóstico depende de la edad del paciente, el grado de afectación y el momento del diagnóstico. Los niños más pequeños (menores de 6 años) suelen tener mejores resultados, ya que sus huesos tienen mayor capacidad de remodelación.