Fracturas de cúbito y radio, ¿Cuáles son las más frecuentes?
Las fracturas de radio y cúbito distal en los niños son comunes, especialmente debido a caídas y actividades deportivas, ya que los niños tienden a usar sus manos para protegerse al caer. Estas fracturas afectan el extremo distal del radio y el cúbito, que son los huesos largos del antebrazo, cerca de la muñeca. Debido a que los huesos de los niños están en crecimiento y tienen placas de crecimiento en los extremos, estas fracturas requieren un diagnóstico y tratamiento cuidadosos para evitar problemas de desarrollo óseo.
Causas comunes de las fracturas de radio y cúbito distal en niños:
- Caídas: La causa más común, donde los niños extienden el brazo al caer para protegerse, generando gran impacto en la muñeca.
- Actividades deportivas: Deportes de contacto, gimnasia, patinaje y ciclismo aumentan el riesgo.
- Accidentes y traumatismos directos: Como choques en bicicleta o caídas desde una altura, que generan un impacto directo en la muñeca.
Tipos de fracturas de radio y cúbito distal:
- Fractura en tallo verde: Común en niños, el hueso se rompe de un lado y se dobla del otro sin quebrarse completamente.
- Fractura torus o en rodete: Una compresión en el hueso que causa que este se abulte sin llegar a fracturarse del todo.
- Fractura completa: Cuando el hueso se rompe completamente en una o más partes.
- Fractura de la placa de crecimiento: Esta fractura afecta la zona de crecimiento en el extremo del hueso, lo cual puede impactar el desarrollo del hueso a largo plazo si no se trata adecuadamente.
Síntomas de una fractura de radio y cúbito distal en niños:
- Dolor agudo en la muñeca o el antebrazo.
- Hinchazón en el área afectada, especialmente alrededor de la muñeca.
- Deformidad visible: El antebrazo o la muñeca pueden lucir torcidos o desplazados en casos graves.
- Moretones en el área de la fractura, junto con sensibilidad al tacto.
- Incapacidad para mover la muñeca o el antebrazo sin dolor.
Diagnóstico
Un diagnóstico adecuado es esencial para evitar problemas futuros, especialmente si la fractura afecta la placa de crecimiento.
- Examen físico: El médico evaluará la movilidad, el dolor, la hinchazón y la alineación de la muñeca y el antebrazo.
- Radiografías: Son fundamentales para observar el tipo y la ubicación exacta de la fractura. Se suelen realizar en varias vistas para confirmar el daño.
- Ecografía o resonancia magnética: En ciertos casos, se pueden usar para visualizar mejor el estado de la placa de crecimiento.
Tratamiento de las fracturas de radio y cúbito distal en niños:
- Inmovilización: La mayoría de las fracturas se pueden tratar con una férula o yeso para mantener los huesos en su lugar mientras sanan.
- Reducción cerrada: Para fracturas desplazadas, el médico puede manipular el hueso para alinearlo externamente sin cirugía.
- Cirugía: En fracturas graves o que afecten la placa de crecimiento, puede ser necesario realizar una cirugía para alinear los huesos con el uso de clavos, tornillos o placas.
- Rehabilitación y fisioterapia: Después de la inmovilización, es importante realizar ejercicios para restaurar la movilidad, la fuerza y la función en la muñeca y el antebrazo.
Complicaciones potenciales
Si bien las fracturas de radio y cúbito distal en los niños suelen sanar bien, existen riesgos de complicaciones, sobre todo si la fractura afecta la placa de crecimiento:
- Desalineación ósea: Si los huesos no se alinean bien durante la curación, puede quedar una deformidad.
- Problemas en el crecimiento: Las fracturas que involucran la placa de crecimiento pueden afectar el desarrollo del hueso y causar que el brazo crezca desigualmente.
- Rigidez y pérdida de movimiento: La falta de rehabilitación adecuada puede llevar a la rigidez de la muñeca y pérdida de movilidad.
- Infección: Si se realiza una cirugía, existe el riesgo de infección en el sitio de la fractura.
Prevención:
Algunas recomendaciones para prevenir fracturas de radio y cúbito distal en niños incluyen:
- Uso de equipo de protección: Usar muñequeras y equipo de protección en deportes de contacto o actividades de alto riesgo.
- Supervisión: Supervisar a los niños en áreas donde puedan ocurrir caídas, como parques, escaleras y superficies irregulares.
- Entrenamiento en técnicas de caída: En deportes como el judo o gimnasia, enseñar técnicas para caer sin usar los brazos como primera defensa puede ayudar.
Conclusión:
Las fracturas de radio y cúbito distal en niños son lesiones comunes que requieren un tratamiento cuidadoso para asegurar una correcta alineación y evitar problemas de crecimiento. La intervención especializada y un tratamiento temprano y preciso marcan una diferencia significativa en la calidad de vida futura del paciente.

Fractura de radio y cúbito que fue tratada con reducción cerrada e inmovilización.

Fractura de radio y cúbito que fue tratada mediante reducción cerrada y osteosintesis con agujas